Biography:

Vagabundeando por los platós italianos y extranjeros, ya desde mediados de los anos 70, he tratado de mantener siempre el mismo planteamiento profesional de humildad, intuición, pasión y sacrifico. El carácter inconsciente y la pasión por el cine, me han ayudado a superar las dificultades que encontré desde el primer día que pisé el laboratorio IL FOTOGRAFO, dirigido por los fotógrafos de plató BENETTI-NARDUCCI-SCWARZ. Fue un gran gimnasio profesional que frecuenté tratando de hacerme con los secretos del oficio a través de las tareas de laboratorio que me asignaban. Entre los trabajos más importantes, aunque aburridos, la esmaltadura de miles de ampliaciones, me dio la posibilidad de observar atentamente las fotos de muchos fotógrafos que se servían de IL FOTOGRAFO . Después de dos anos de laboratorio, el cambio de rumbo de mi carrera tuvo lugar gracias al encuentro con Mimmo Cattarinich. Mimmo era uno de los mayores fotógrafos italianos y me facilitó conocer otros aspectos de nuestra profesión. Por primera vez era titular de un plató. La película era una policiaca, género que estaba de moda por aquellos anos, se titulaba LA MANO SINISTRA DELLA LEGGE. Recuerdo la emoción del primer día de rodaje; no conseguí hacer ni una sola foto, estaba tan deslumbrado por el rodaje que me quedé pasmado. Superé el impacto gracias al aliento y a la ayuda del protagonista, Enrico Maria Salerno, que había intuido mi situación. Desde entonces ha pasado mucho tiempo. La incosciencia juvenil me ha llevado a tomar decisiones aparentemente azarosas, pero que después han resultado ser importantes. Un ejemplo: nunca he lamentado ir a Marruecos para la película de Salvatores, MARRAKESCH EXPREES, enriqueciendo sobre todo mi experiencia. Haber conocido en los anos 90 la productora Tilde Corsi y su socio, el guionista Gianni Romoli, fue especialmente significativo. La colaboración decenal con su productora me ha permitido estar en todos los rodajes del director Ferzan Ozpetek. Y al mismo tiempo, durante esos anos, se anadían experiencias profesionales diferentes y extranas, como la boda en Budapest de Cicciolina con el artista americano Jeff Koons y su luna de miel en Grecia, o bien, la posibilidad que tuve de hacer un viaje de vuelta en coche de Kirghisia a Roma pasando por Moscú (!15.000 km!). Volviendo al presente quisiera citar dos rodajes que he tenido la suerte de seguir últimamente. La emoción que sentí hace dos anos al fotografiar por primera vez a Sofía Loren premio Oscar, en el plató de Lina Wertmuller, y el otro haber estado en estrecho contacto este ano con el director cult Abel Ferrara en el rodaje MARY seleccionado para el festival de Venecia.